Cuidado de la piel anticontaminación
¿Qué está haciendo la contaminación con su piel?
Hoy en día, la contaminación del aire es una preocupación generalizada. La cantidad de contaminación a la que estamos expuestos cada día puede prestarse a debate, pero una cosa es segura: esta afecta la salud humana en todo el mundo, especialmente la salud de la población urbana. Los que vivimos en áreas populosas estamos regularmente expuestos a agresores, tanto internos como externos, a través del aire, agua e incluso nuestra propia piel. Desde los humos de escape hasta los UV y el aire acondicionado. Nadie escapa de ellos.
¿Cómo la contaminación daña la salud de la piel?
Por suerte la piel es un órgano extraordinario. Si las funciones barrera de nuestra piel están saludables, estas bloquearán la penetración de diversos contaminantes. El problema, sin embargo, es que una exposición prolongada o repetida a altos niveles de contaminantes compromete las funciones barrera de la piel.
Degradación de lípidos y colágeno. Las proteínas de queratina, que protegen la piel contra la deshidratación, inflamación y las alergias, son destruidas. Se modifica la calidad y cantidad de sebo que producimos, por lo que desarrollamos erupciones, poros dilatados, manchas, acné, opacidad. Experimentamos el envejecimiento prematuro de la piel o, peor aún, peligrosas enfermedades de la piel.
No hay duda sobre ello: ¡la defensa contra la contaminación es la nueva misión cotidiana de la piel! Esta misión debe iniciarse a una edad más temprana y es tan importante como cepillarse los dientes o cualquier otro ritual cotidiano. Empezar con acciones simples está muy bien. Pero, en la medida en que envejecemos y/o exponemos nuestra piel a mayores niveles de contaminantes, debemos adoptar rutinas de cuidado de la piel anticontaminantes más sofisticadas. Puede que usted no vea los residuos grises de contaminación sobre su rostro. Pero, créanos, estos se están acumulando bajo su piel.
3 etapas para una piel saludable
Afortunadamente, nunca es demasiado tarde para eliminar y/o minimizar los daños de la contaminación. Estos son nuestros consejos de experto para desarrollar una rutina de cuidado de la piel anticontaminación intuitiva y eficaz.
1. Limpiar
Incluso las pieles sensibles necesitan una limpieza cuidadosa, dos veces al día. Su limpieza de la mañana le ayudará a limpiar su cutis y controlar el exceso de sebo. Su limpieza nocturna retirará los contaminantes y residuos de maquillaje. Escoja una fórmula delicada, según el tipo y necesidades de su piel: leche limpiadora, agua micelar, espuma, loción. Utilice todo lo que le haga sentirse limpi(o)a y más confortable.
2. Hidratar
La hidratación le ayudará a mantener y/o restaurar su barrera cutánea, evitando la deshidratación y la inflamación, los principales enemigos de la piel y la causa principal del envejecimiento y opacidad prematuros. Para garantizar una piel saludable, aplique, mañana y noche, una crema, emulsión o gel específicamente formulados para combatir la contaminación.
Tenga en mente que usted necesita también hidratar su piel del interior. Beba de 1,5 a 2 litros de agua diarios y consuma gran cantidad de frutas y verduras, especialmente aquellas que ayudan a controlar el estrés oxidativo: moras, frambuesas, bayas de goji, alcachofas, col rizada, espinaca, frijoles. Y aquí va una buena noticia: ¡el chocolate amargo contiene antioxidantes beneficiosos para usted! Por último, mientras más hidratada esté, más redensificada y radiante estará su piel.
3. Cuidado esencial anticontaminación de la piel agregado
Utilice un hidratante 30+ SPF cuando su piel esté expuesta tanto a los UV como a la contaminación durante el día. Los UV, especialmente los UVA, incrementan los efectos dañinos de los contaminantes.